La gente me señala, me apuntan con el dedo, susurra a mis espaldas y a mí me importa un bledo. Qué más me da si soy distinta a ellos, no soy de nadie, no tengo dueño. Yo sé que me critican, me consta que me odian, la envidia les corroe, mi vida les agobia. Por qué será, yo no tengo la culpa, mi circunstancia les insulta. Mi destino es el que yo decido, el que yo elijo para mí. A quién le importa lo que yo hago, a quien le importa lo que yo digo, yo soy así y así seguiré y nunca cambiaré (X2) Quizá la culpa es mía por no seguir la norma, ya es demasiado tarde para cambiar ahora. Me mantendré firme en mis convicciones, reforzaré mis posiciones. Mi destino es el que yo decido, el que yo elijo para mí. A quién le importa lo que yo haga, a quién le importa lo que yo diga, yo soy así y así seguiré y nunca cambiaré (x4) (Alaska y Dinarama)
Que se apunten al cuento los que se empeñan en señalar cada cosa que hago, los que me llaman pelota, los que se quejan porque no estudio lo suficiente, los que me odian simplemente por no tener reparos en tocar tierra, los que me quitan la cara y no me saludan, los que no comprenden que se pueda uno reir de la vida, los que no entiendan que también tengo sentimientos aunque sea graciosa, los que me llaman charlatana, los que me llaman trepa, los que no se crean que sea amiga de profesores de la Complutense, los que no confían en mí para realizar proyectos y, en general todos los que se meten conmigo en el día a día simplemente porque "la envidia les corroe". A todos ellos, que sepan que me importa tres narices y que no voy a cambiar aunque sólo sea por joder...
|