Michael Ende murió el 28 de agosto de 1995 de un cáncer de estómago. Hace dos días se cumplió el décimo aniversario. Aún hoy, sus libros siguen publicándose y vendiéndose como rosquillas. Yo crecí con ellos, soñando con montar sobre Fújur y rescatar a la pobre Momo de los hombres grises para que no me robaran el tiempo que pasaba jugando con Jim Botton. Desde aquí el recuerdo y la recomendación. No son libros infantiles, son parte de todas las edades, siempre transmiten algo que se queda en el corazoncito, leed a Michael Ende y no os arrepentiréis.Rescatemos la fantasía. |